Oración a la Virgen María para niños

La educación católica nos enseña que la Virgen María es la madre de Dios y la madre de todos, por lo que nos cuida con devoción y amor, tal y como si fuéramos sus propios hijos.

Por lo tanto, si buscas oraciones a la Virgen María para que los niños y niñas las reciten y aprendan, nosotros te ayudaremos con esa actividad, ya que tenemos para ti una grandiosa selección de oraciones hermosas dedicadas a la Virgen María.

¡Junta tus manitos!, cierra los ojos y prepárate para elevar al cielo las plegarias más amorosas para solicitar la intercepción de la Santísima madre de Jesucristo y del Espíritu Santo.

Por qué debemos hacer oraciones a la Santísima Virgen María

Rezarle a la Virgen María es una de las tradiciones más antiguas de los católicos, y cuyas raíces de esta tendencia proviene del cristianismo primitivo, en donde se le empezó a venerar y a rendir tributo a María, la madre de Jesucristo.

Por esta razón, rezarle a la Virgen María es una práctica importante en la fe católica.

¿Sabes algunas otras razones por las que es importante orarle a la Virgen María por su intercepción?

Si no sabes la respuesta, a continuación, te explicamos la importancia de esta devoción:

Las oraciones a la Santísima Virgen María son agradables a Dios

¡Nadie ha amado y honrado a la Virgen María más que Dios mismo! De hecho, fue el mismo Dios que la eligió entre todas las mujeres para ser la Madre de Cristo, su Hijo único.

Además, ella es la esposa del Espíritu Santo y la madre del Hijo unigénito de Dios.

Podemos ver que en Lucas 1:42 aparece el momento en que le exclamó su prima Isabel a la Virgen María en el cuello: «¡Bendita eres tú entre las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre!

Estas oraciones son ejemplo de humildad

Por su abnegación y obediencia, María es un modelo de humildad. Y como era «llena de gracia», fue el instrumento perfecto de Dios.

A Dios le agradan las personas obedientes y respetuosas, que tal y como lo hizo maría, hagan su voluntad, tan solo confiando en su palabra.

Es una manera de imitar a Jesús

Jesús de Nazaret honraba y respetaba a su madre, siguiendo el Cuarto Mandamiento de honrar al padre y a la madre. Es por eso, que, como hijos de Dios, también debemos hacerlo, lo cual es muy agradable a los ojos del Ser Supremo.

Es una tradición de los cristianos primitivos

En los primeros años del cristianismo, y aun durante siglos después, se puede ver que, a lo largo de la historia, muchos santos llevaban en sus manos el Santísimo Rosario, como señal de respeto y honra a la Virgen María.

¿Quieres actuar como parte de la santidad? Entonces, realiza con mucha fe y amor algunas oraciones a la Virgen María, que ella como es una madre amorosa y buena, siempre te escuchará.

María es una interceptora por excelencia ante Jesús

Como Jesucristo honra a su madre, siempre escucha sus peticiones. Es por eso que María influye en su Hijo y es un canal directo para hablar con Dios. De hecho, Jesús realizó su primer milagro público porque su madre intercedió por él.

Además, en el Antiguo Testamento, la madre del rey era quien intercedía por el pueblo y era parte fundamental del mandato y orden de los profetas.

Por otra parte, María desciende de la Casa de David y Dios sigue enviándonos a su madre para ayudarnos.

Las oraciones a la Virgen María son una manera de unión con Jesús

María estuvo presente en la encarnación, nacimiento, primer milagro, pasión y muerte de Jesús, por lo que es más que evidente que Jesús y María están unidos por carne, sangre y alma.

A esto se le suma que, a lo largo de la historia, María ha aparecido en diversas ocasiones, como en Fátima, y en cada una de estas apariciones milagrosas, su mensaje es orar y hacer reparación por los pecados de los hombres.

Como ves, no hay dudas de que rezar a la Santísima Virgen María fortalece nuestra relación con Dios y es una expresión de devoción y confianza en su ayuda divina

Las tres oraciones a la Virgen María más recitadas por los católicos

Aunque puedes orarle a la Virgen María por los casos difíciles, por la salud, por el día o por la noche, en realidad existen tres oraciones principales que son reconocidas en todo el mundo y que son perfectas para que los niños y niñas las reciten en sus momentos de encuentro con Dios.

El Ave María

Esta es probablemente la oración más conocida y recitada por los católicos a nivel mundial y es una invocación a la Virgen María pidiendo su intercesión.

Este es el texto del Ave María:

Dios te salve, María,

llena eres de gracia,

el Señor es contigo.

Bendita tú eres entre todas las mujeres,

y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios,

ruega por nosotros, pecadores,

ahora y en la hora de nuestra muerte.

Amén.

El Magnificat

Se trata de otra de las oraciones a la Virgen María más recitadas en el mundo. De hecho, es una oración de alabanza que proviene del Evangelio de Lucas.

Texto de la oración:

Proclama mi alma la grandeza del Señor,

se alegra mi espíritu en Dios mi salvador,

porque ha mirado la humillación de su esclava.

Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,

porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:

su nombre es santo,

y su misericordia llega a sus fieles

de generación en generación.

Él hace proezas con su brazo:

dispersa a los soberbios de corazón,

derriba del trono a los poderosos

y enaltece a los humildes,

a los hambrientos los colma de bienes

y a los ricos los despide vacíos.

Auxilia a Israel, su siervo,

acordándose de su misericordia

–como lo había prometido a nuestros padres–

en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo,

como era en el principio, ahora y siempre,

por los siglos de los siglos. Amén.

La Salve

La Salve es una oración de súplica que pide la intercesión de la Virgen María, reconociendo su papel como madre misericordiosa.

Este es el texto de la Salve:

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia,

vida, dulzura y esperanza nuestra;

Dios te salve.

A ti llamamos los desterrados hijos de Eva;

a ti suspiramos, gimiendo y llorando

en este valle de lágrimas.

Ea, pues, Señora, abogada nuestra,

vuelve a nosotros esos tus ojos

misericordiosos; y después de este destierro,

muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre.

¡Oh clemente, oh piadosa, oh dulce Virgen María!

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios,

para que seamos dignos de alcanzar las promesas

de nuestro Señor Jesucristo.

Amén.

Estas son las advocaciones marianas a las que puedes orarle

¿Has escuchado alguna vez el nombre de «advocaciones marianas»? Si no sabes la respuesta, pues simplemente las advocaciones marianas son diferentes nombres o títulos con los que se venera a María, la madre de Jesús, pero se trata de la misma persona.

Estos nombres se derivan de atributos que se encuentran en las Sagradas Escrituras, la veneración popular o características atribuidas a ella.

Algunas advocaciones son dogmáticas y muy conocidas, como las siguientes que te vamos a mencionar:

  • Nuestra Señora de Guadalupe: esta es la Patrona de México y de toda América Latina. Se le puede pedir por la protección y la unión de las familias, así como por la paz y la justicia en los pueblos.
  • Nuestra Señora de Lourdes: esta virgen es conocida por sus apariciones en Lourdes, Francia. Por lo general, se le pide por la sanación de los enfermos y por el consuelo de los afligidos.
  • Nuestra Señora del Carmen: se trata de la protectora de los marineros y del purgatorio.
  • Nuestra Señora de Fátima: es conocida por sus apariciones en Fátima, Portugal. Se le conoce como la interceptora por la paz en el mundo y la conversión de los pecadores.
  • Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa: hizo su aparición en París, Francia, donde entregó la Medalla Milagrosa.
  • Nuestra Señora de la Asunción: esta advocación es celebrada en muchos lugares como la patrona de la ciudad o el país.
  • Nuestra Señora de la Anunciación: se celebra el momento en que el ángel Gabriel anunció a María que sería la madre de Jesús. Se le puede pedir por el cumplimiento de la voluntad de Dios en nuestras vidas.
  • Nuestra Señora de la Paz: advocación que pide por la paz en el mundo y en los corazones de las personas.
  • Nuestra Señora del Perpetuo Socorro: a ella se le pide por ayuda en situaciones difíciles y por el socorro continuo en la vida diaria.
  • Nuestra Señora de los Dolores: reconocida por su compasión y sufrimiento al pie de la cruz.

Estas advocaciones reflejan diferentes aspectos de la vida y la gran misión de la Virgen María en la tierra, por lo que pueden ser invocadas según las necesidades y circunstancias personales.

Ahora que ya sabes cómo puedes rezarle a la Virgen María, también te recordamos que a ella le gusta mucho que te comuniques con ella como con una madre, para que le digas lo que necesitas, quieres y anhelas 🙏 .